18 may 2008

Argentina no es un país pobre, es un país injusto

(...) La producción de trigo alcanza para elaborar un kilo de pan por día para cada habitante. La de los tambos para tres cuartos de litro de leche por persona por día. Es decir, mucho más de lo necesario. Pero las cifras del Indec muestran que más de dos millones de argentinos no consumen los nutrientes imprescindibles y hay consultores privados, como el sociólogo del Conicet, Agustín Salvia, que eleva esa cifra a cinco millones de personas. Sergio Britos, licenciado en nutrición y docente de la UBA, explicó a Página/12 que “Argentina produce el equivalente a 26.000 calorías diarias por persona, pero sólo consume en promedio 2300. Con el excedente se podría alimentar a 410 millones de personas más”, poco menos que la población de la Unión Europea.

La producción de carne vacuna, porcina, ovina y caprina es suficiente para que consuma medio kilo de carne diario por persona. También se produce lo suficiente para que cada argentino pueda comer un kilo de verdura y medio kilo de frutas por día. Una primera lectura invita a pensar que ante semejante abundancia de oferta los precios de los alimentos deberían ser bajos. Pero no es así. Desde mediados de 2007, el precio internacional del trigo, el maíz, la soja y el girasol –los cuatro granos de mayor incidencia en la canasta alimentaria– aumentaron un promedio del 75 por ciento. En ese período, en una de las cadena de supermercados que apunta a las clases populares, el paquete de un kilo de la harina aumentó 117 por ciento; los fideos, 116 por ciento; los huevos, 58 por ciento y la carne subió un 46 por ciento. (...)

Por Roberto Navarro, en página/12.

9 may 2008


Vivimos dentro de una realidad distinta, cada uno dentro de su propio marco, exhibidos en el museo de la sociedad.